50 aniversario del Speedmaster

El sitio de Omega presenta un extraordinario audiovisual interactivo acerca de la historia de este reloj, el único que ha viaja a la Luna. Creado en 1957, como "un nuevo tipo de cronógrafo, diseñado para la investigación, la industria y el deporte", basado en el calibre Lemania 321 (hoy Omega 1861), es toda una leyenda, que toma 14 meses para fabricarla con 195 piezas y 80 manufacturas. En aquella década, personal incógnito de la Nasa fue a una relojería de Houston para comprar varias marcas. Luego, cada una fue sometida a pruebas de resistencia a golpes, humedad, inmersiones, aceleraciones y cambios súbitos de presión. Sólo el Speedmaster las sobrevivió.

En 1968 este reloj sirivió para que el explorador Ralph S. Plaisted llegara por vez primera al Norte verdadero y en 1969 estuvo en la Luna, en la muñeca del astronauta, Neil Armstrong.

Durante sus 128 viajes al espacio ha demostrado su excelencia, por ejemplo, cuando midió el momento crítico en que se debían encender los motores del módulo del fallido vuelo de la misión Apollo 13 en 1970, porque la computadora había dejado de funcionar. Un error le hubiese costado la vida a la tripulación, puesto que calculaba su reingreso a la atmósfera. Y durante el encuentro Soyous-Apollo, en 1975, "el momento más cálido de la guerra fría", el instante de contacto con el módulo que unió a las dos naves se calculó, por parte de astronautas estadounidenses y de cosmonautas rusos, con sendos Speedmaster, puesto que la agencia espacial Soviética también lo usa a bordo de sus naves.

Muchas manufacturas, como Bulova, ladraron en un intento desesperado por usurpar el lugar que Omega ganó a pulso en la Nasa. Pero no pudieron porque quienes calificaron a este reloj eran ingenieros interesados en obtener lo mejor. Hoy, ya está en desarrollo el que viajará a Marte y, en 2008, será el cronométro oficial del primer intento por circunnnavegar la Tierra en un avión impulsado por energía solar. Rolex, ¿cómo te quedó el ojo?

Observen cómo el audiovisual refleja las funciones de un cronómetro. Si termina un segmento regresa al inicio, como cuando se presiona el botón que cancela la función de medición del reloj. Si se interrumpe, la voz del locutor se desvanece, está filmado en capas, las gráficas 3D son magníficas y el ruido de fondo recuerda a 2001, Odisea del Espacio. No se lo pierdan.
Imágenes: Sitio Web de Omega.