Monday, July 11, 2011

La muerte de Facundo Cabral

Foto: Radio Netherlands.
"Aló", respondí. "¿Está doña Mona?", dijo una voz vigorosa con cierta urgencia (era obvio que se trataba de larga distancia). "No", le dije, "pero la encuentra mañana tal vez hacia las tres de la tarde". "Muchas gracias, dígale que la llamó Facundo Cabral". Así supe de este hombre, la Trova en realidad no es lo mío aunque sí lo es de muchas personas que estimo. No conocía su obra o trayectoria pero por medio de comentarios, lecturas en la prensa y ahora en la Red me formé un cuadro suyo. Lo último que sabía fue sobre su conversión al cristianismo.

Habría de pasar bastante tiempo antes de volver a saber de él, cuando dio un concierto aquí en 2009. Y hoy, porque lo mataron en Guatemala. La noticia me cayó como hielo cuando uno tiene 40 grados de temperatura. Luego, fue cobrando visos muy complejos y las teorías de conspiración no se hicieron esperar. A estas alturas, como dijo Borges, "es el espanto". Sus implicaciones para el país podrían ser terribles, sucede en un periodo electoral convulso, deplorable, lleno de sangre. Aterra ver la reacción de algunos candidatos y entristece pronosticar que la investigación oficial, harto necesario de que sea transparente y lo más rápido posible, vaya tomando ya la cadencia de muchas otras.

Algo así no tiene nada de positivo, sin embargo, allá a lo lejos, creo ver un destello, un impulso que conmociona a la gente. Tal vez muchos, como yo, se han preguntado qué pasa en este país empobrecido, brutalizado y siempre al borde de un caos. ¿Nos hace falta una muerte célebre para despertar?

Ya teníamos en nuestro haber a un embajador alemán, el conde Karl von Spreti, y a uno gringo, John Gordon Mein. Ambos asesinatos se dieron en el contexto de la Guerra Interna (Ryszard Kapuściński explica la del primero en un libro, mientras la del segundo se atribuyó a las FAR). Ahora podemos contar con que en el país se apagó la voz de un hombre de larga trayectoria musical, cuyo mensaje era de concordia, paz y encuentro con la Verdad. Ya no es de sentirlo sino de empezar a tomar las riendas del destino en nuestras manos.

3 comments:

J M said...

era una institución, gente de todo tipo lo admira. por eso es tan llorado...

NotungWulf said...

Fue una noticia surreal, de esas que encapsulan la verdadera dimensión del horror. Me la dijeron el domingo y es una mezcla de shock con la tristeza de que un país con tanto potencial se vea infestado con tanta tragedia. Añadiendo que sucedió en donde yo paso a diario a esa hora para ir al trabajo, muy mala noticia.

Fernando Luna said...

Como lo dije en mi post, lamento mucho la muerte del argentino, así como del Salvadoreño, el Mexicano, el Africano y el Afgano, y la muerte de todos mis paisanos.... pero es muy doloroso que a una persona q tanto a pregonado la tolerancia y la paz, fuera asesinato de tal forma, y quizas, solo nosotros los chapines podemos sentir ese lamento, por que estamos sumergidos en esta pobre sociedad, en donde buscamos paz, justicia, igualdad y tranquilidad... -pienso-