Friday, August 07, 2009

G.I. Joe: The Rise of Cobra


Technically, we don't exist. We answer to no one. And when all else fails, we don't”. General Hawk (Dennis Quaid).

Duke: What happened to you?
Ripcord: I went through the train... what happened to you?
Duke: I went over it...
Ripcord: Was it awesome?


Ambos ejemplos bastan para ilustrar el nivel intelectual de los diálogos de este filme de Stephen Sommers (dos partes de The Mummy y Van Helsing) que sigue una historia lineal, elemental y tan plástica como la línea de Hasbro en la cual se inspira: la Global Integrated Joint Operating Entity o J.I. Joe. Aquellos juguetes que glorificaban la guerra y al soldado estadounidense, se convierten en manos de Sommers en un equipo predecible, de mentes sencillas pero buenas. Mientras, los malos, liderados por Cobra (Christopher Eccleston) son incapaces del menor bien. A pesar de las breves incursiones en la psicología de los personajes, vía flashbacks, éstos no llegan nunca a redondearse más allá de la apariencia que quiere darles.

Acción trepidante (apenas hay lugar para algo de protoromance, justificación política y explicación para dar coherencia lógica), adrenalina al máximo, tecnología futurista de punta, una persecución inolvidable por las calles de París (filmada en Praga) y una lección sobre cómo destruir a la Ciudad Luz en cinco minutos, más la consabida caída de la Torre Eiffel (es el tercer filme que la destruye: le llevan ganas al monumento), son sus mejores y únicos aportes inolvidables, según considero. Sin embargo, este comentario tiene sentido sólo si se disecta y analiza la lica con lupa, porque, como un todo, funciona a la perfección como una propuesta escapista y de puro entretenimiento. Es como la imitación china de un reloj caro, que a pesar de albergar una máquina barata, se ve lujosa por fuera.

Entre lo bonito está Sienna Miller, por supuesto, así como la actuación de Dennis Quaid (quien participó por insistencia de su hijo, fan de la serie). Y entre lo feo, las gráficas que no llegan a crear una realidad virtual creíble (vean con ojo avieso la escena del beduino en el desierto, a mí me recordó los tiempos de los dioramas), la linealidad de la historia y los cambios súbitos de tendencias en algunos personajes.

Sommers, quien siempre ha querido dirigir una cinta de Bond, James Bond, cita a ocho de ellas en este filme. Hay combates que me llevaron de la mano a Star Wars y Scarlet O'Hara (Rachel Nichols) surge directamente de Gone With The Wind. The Mummy, Transformers, conceptos de Voyager e incluso de Mortal Kombat y de la serie Kung Fu están, a mi entender, entretejidos con la trama de este éxito de acción y glorificación de la guerra, pero fallido, incapaz siquiera de llegar a ser un fetiche que apele a estimular, por largo rato, a una inteligencia mediana.

2 comments:

Anonymous said...

mmmm es una pelicula para niños y para los q crecieron con gi joe q esperas la pelicula logro su objetivo o esperabas ver al comandante cobra y a destro con dialogos de shakespeare mmm y si hablamos de nivel intelectual medio mmm q haces viendo foot ball q veo en tu blog q hablas de eso , eso si es estimulacion para un nivel intelectual del mas bajo y el gozo de los ingnorantes no digamos en este pais

klavaza said...

Tampoco diálogos a nivel de Shakespeare, pero por lo menos algo que no insulte la inteligencia de un niño hubiera estado mejor. Y es paradójico porque a muchos de los que crecieron viendo G.I. Joe tampoco les gustó, pero porque no seguía la línea ni de las animaciones, ni de los cómics. Fút? Sí. Hasta hay un estudio que dice que la cancha es una emulación simbólica del universo pues...