No recuerdo cuándo lo compré, pero sí la impresión que me provocó, sabiendo a ciencia cierta que el cuarteto llegaría a su fin tarde o temprano. Aquél efecto dura hasta ahora y para que no pierda su magia lo oigo poco y a lápsos largos. Es interesante, pero no me evoca nostalgia o saudades, siempre me trae algo nuevo, como la primera vez. Tampoco olvido las conversaciones en cuartos de cuates, confirmando por la portada que, en efecto, la foto daba testimonio de que Paul había muerto. Una teoría de conspiración que se mantiene vigente. Era 1969, hoy estamos en 2009 y The Beatles también siguen vigentes. Me es imposible olvidar un artículo de prensa que leí poco después de la disolución oficial de la banda. El periodista había entrevistado a varios señudos y conocedores titanes de la industria musical. Sentenciaron que, si mucho, se venderían sus discos durante unos 10 años más. Si pues, ¿y aquellos genios de las disqueras, por dónde andarán ahora?
Foto: Yahoo! News.
2 comments:
Lo que más me gusta es toda la historia que guarda esta portada... historia musical y personal de los integrantes.
Mirá, es como un resumen de todo el rollo, la otra es la portada de St. Pepper (People We Like, infestada de ocultismo)...
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